Comer alimentos de temporada, ¿qué beneficios nos proporciona?
Con la recién llegada primavera se nos abre un gran abanico de alimentos de temporada muy ricos y sanos; desde la fruta (cerezas, fresas, frambuesas, nísperos…) hasta la verdura (acelgas, alcachofas, endivias, espárragos…), pescado (besugo, anchoa, caballa, jurel…) o carnes (cordero, carnes de oca, ganso y pavo…).
Cada planta y animal tiene un ciclo de vida diferente, por tanto, la temperatura y la luz marcan su desarrollo, de ahí que encontremos un alimento más común en una estación que otra.
Aunque la existencia de invernaderos ya nos proporciona productos durante todo el año, lo normal es comer cada producto cuando toca por diferentes razones: por su sabor, aroma y textura, y por ser más saludable, más barato y más ecológico.
Un producto de temporada siempre tiene más sabor porque se recoge en el momento óptimo de maduración y apenas viaja para llegar a su destino, reduciendo de ese modo su precio y ahorrando en los costes de almacenamiento y transporte.
Entonces, ¿qué beneficios nos proporciona comer productos de temporada?
- Frutas y verduras más ricas y saludables.
- Productos más económicos y de mayor calidad.
- Alimentación variada durante todo el año.
- Menor consumo de energía y menos emisiones de CO2.
- Menos residuos y más cultivos sostenibles.